Recientemente inicié un nuevo proyecto de creación de marca, identidad y diseño de sitio web para un cliente del Reino Unido. Para obtener una guía en dirección de la marca, me reuní con ellos por 2 horas para mirar algunas docenas de sitios web y logos.

Los resultados fueron extremadamente valiosos – ¡y no lo que yo esperaba!
He aprendido que paga el investigar los gustos de un cliente antes de poner la pluma en el papel.

Mi propósito para la sesión informativa

Antes de comenzar el trabajo de diseño para el cliente (hoy), quería solidificar mi entendimiento de la nueva marca, y obtener una guía en la dirección del diseño. ¿Cómo podríamos imaginar esta marca a través de aspectos como logo, color, mensaje, tono de voz etc.?

Este cliente es representado por un equipo de liderazgo de tres personas, con quienes nunca he trabajado antes, y estaba al tanto con nuestras reuniones anteriores, que ellos eran tres personalidades fuertes, con sus propios gustos y opiniones.

Mi sentido arácnido me dijo que sería importante iniciar aproximadamente en la dirección correcta, para evitar tener que desechar dos o tres conceptos de diseño (lo que solía hacer hace tiempo, pero hoy tiendo a tirar por la canasta de tres puntos, todo el tiempo, y la encesto más veces de las que no).
Ya había estado revisando el terreno de la competencia, así que era sencillo guardar pantallas de los sitios web de sus competidores. Pensé que simplemente podríamos mirar estas imágenes y discutir lo que sobresalía como fuerte o como pobre.

Lo que preparé para la sesión

Ya que los principales competidores (de acuerdo a la clasificación de Google) eran muy débiles, pensé que podríamos salir con más ejemplos de qué no hacer en lugar de enfocarnos en lo positivo, así que agregué un par de docenas de imágenes de sitios web alternas. Éstos eran generalmente sitios que yo sentía tenían una estética de diseño fuerte, combinando comunicación clara con identidades audaces.

Finalmente, acumulé un grupo de 36 logos (algunos diseñados por nosotros, pero en su mayoría otros logos que me gustan) para discutirlos.
En total, la preparación para esta sesión tomó sólo un par de horas.

Resultados sorprendentemente útiles

El refinado de las características de la marca fue muy rápido, como esperaba. Ya conocíamos nuestros puntos fuertes muy bien, y lo que el mercado necesita.
Así que pasamos a la competencia, que ya estábamos de acuerdo era muy débil. Para aclarar, los competidores directos eran muy lánguidos. Este cliente diseña y construye quioscos de exhibición de alta calidad, y provee un excelente y detallado servicio, siempre yendo más allá para asegurarse que sus clientes se sientan completamente respaldados y capaces de concentrarse en sus propios negocios.

Mostrar el resultado final ("¿qué obtengo?")

La principal revelación de mirar a la competencia fue darnos cuenta que fotos de calidad de verdaderos quioscos en acción era clave. Las imágenes generadas por computadora no eran creíbles, porque no probaban que el quiosco alguna vez se construía. Tampoco lo eran las imágenes de catálogo de cómo podrían ser los quioscos.

Lo que más llamó nuestra atención era ver quioscos con gente en ellos, ¡de preferencia una multitud de gente!
Lo que queríamos ver era el resultado final del proceso. Mirando esos sitios a través de los ojos de un cliente potencial, los más creíbles fueron los que claramente mostraron el beneficio final, ¡lo que en este caso es "un quiosco muy ocupado en una exhibición"!

Seguro, es grandioso mostrar un quiosco radiante y espléndido la noche anterior al inicio de la exposición, pero eso no es la cosa más importante para un cliente. Su éxito depende de su quiosco trabajando, atrayendo una multitud de visitantes en el día. Un gran diseñador de quioscos es el que puede entregar ese servicio. De hecho, eso es lo que nuestro cliente hace muy bien – entender la psicología de los clientes de la exhibición y cómo diseñar quioscos que los atraigan y mantengan su atención lo suficiente como para enviarles un mensaje.

¡Nunca asumir nada!

El proceso de mirar los otros excelentes sitios y logos fue aún más revelador para mí.
Los sitios que yo creía se veían muy bien – ya sabes, los muy modernos que se ven tan de " ahora" para un diseñador web profesional, esos que admiras en las galerías CSS – no sobresalieron para nada con el cliente.
Hubo varios diseños por los que pensé, "definitivamente disfrutarán este manejo de letras o esa combinación de colores", sólo para que los clientes se sentaran allí y dijeran "Lo odio, siguiente".

Revisar estos 25 diseños me dio una gran ventaja en el proceso de diseño que estoy a punto de iniciar, reduciendo tal vez 90% de los caminos que pude haber tomado hoy.

No hay razón de producir algo que crees que funciona, si tu cliente lo va a odiar. Y no importa cuánto deseemos lo contrario, cuando pagan el recibo, no necesariamente les gusta el resultado. Yo sé que, algunas veces, un sitio escueto, aburrido y feo puede de hecho ser más efectivo que uno agradable. Pero la gente no viene a mí por un sitio feo. Ellos gastan su dinero en obtener algo que les gusta.

Sólo por seguir un simple proceso de mostrar cosas, dejar a la gente hablar sobre cómo los recursos les impactan, tomando muchas notas, y haciendo ajustes a través de algunas preguntas inteligentes, me salvé posiblemente de 2-3 días de tiempo de diseño equivocado. Costo: 4 horas.
Ciertamente es un proceso que seguiré de nuevo. Y la próxima vez, preparar la presentación tomará una fracción de tiempo.