En inglés, el término community manager se utiliza para referirse a la persona que representa o preside una sociedad o agrupación de vecinos, propietarios de bienes inmuebles o habitantes de viviendas departamentales, etc.  Con la popularización de internet, y tras el desarrollo y auge de las redes sociales como: Myspace, Facebook, Youtube,  Badoo, Metroflog, etc., las grandes empresas se vieron en la necesidad de participar en estos universos virtuales para aprovechar la comunicación directa con los millones de usuarios que interactúan día a día en este tipo de redes.

Así surge la figura del Online Community Manager, un perfil profesional de reciente creación, que al igual que un representante de vecinos, cumple con la función de ser el responsable de liderar una comunidad específica, pero en este caso, en internet.

Algunas de sus funciones son: la interacción diaria con los miembros y visitantes, la generación de información novedosa (entrevistas, textos, imágenes y videos) que estimule la discusión entre los miembros; la resolución de quejas, comentarios negativos y dudas, y la participación en foros de discusión.

Pensemos por ejemplo en el perfil de algún producto, empresa o figura pública que hayamos visitado en Facebook. Alguien tiene que estar al tanto de las interacciones en el perfil, y aunque pudiera pensarse que cualquier persona puede llevar esta tarea a cabo, existen ya una amplia oferta de seminarios, talleres y cursos, con el objetivo de  capacitar profesionalmente a las personas que desean desempeñarse en esta posición.  
 Aún existe cierto recelo en la valoración de esta nueva actividad, pero lo cierto es que en países como Estados Unidos, esta labor es ampliamente respetada, y ya existen empresas que ofrecen este tipo de servicios de manera más sistematizada a sus clientes.

En países de habla hispana, España lleva la delantera, ya que incluso existe la Asociación Española de Responsables de Comunidad, que ofrece seminarios, información estadística y otros servicios a sus socios para elevar la calidad y el respeto hacia esta nueva profesión.

Ya sea a través de un especialista en el tema, o por cuenta propia, actualmente la participación en las redes sociales es fundamental para que más personas puedan enterarse de la existencia de un producto, servicio, empresa o figura pública.  No es necesario ser una gran transnacional para aprovechar las ventajas de la WEB 2.0, yo he visitado los perfiles públicos de microempresas, nuevos grupos musicales, editoriales o revistas locales en distintas redes y sus visitantes participan, preguntan, critican, agradecen y hasta comparten puntos de vista entre sí.

Pero eso sí, nunca está demás tomar un curso o pedir la asesoría de un profesional en la materia. 

Ramiro Figueroa