Un buen y correcto servicio de hosting debe ofrecer unas características clave y básicas. A la hora de contratar un web hosting, lo principal que uno mira es lo que te ofrece y lo que no. Como mínimo deberían ofrecer un seguido de recursos tales como: alojamiento de dominios ilimitado para poder disponer como uno desee de cuantos dominios necesite su negocio o web, sin limitación; ancho de banda amplio, el ancho con que transita la información en internet es vital y como mínimo debería de ser de 50 GB; el espacio en el disco, osea, el espacio del que dispones para colgar tu dominio, éste debería ser de un mínimo de 500 MB para ir bien, aunque estamos hablando de lo más reducido, sería mejor obtener más; que sea capaz de manejar bases de datos, principalmente el MYSQL, que te permite almacenar información a través de tablas, básicamente es lo que nos interesa en nuestra web, así le das la oportunidad a la gente que se suscriba para seguirte, para si ofreces un obsequio, para poder recibir un boletín y mantenerse informados, etc., por ello necesitas almacenar, al menos, un nombre y un correo electrónico en una base de datos y gestionarlo, así que es important; también lo es que este web hosting pueda almacenar subdominios de manera ilimitada; las cuentas de e-mail también es una característica que se deben tener en cuenta para elegir, deberían ofrecerte la oportunidad de crear tus propias cuentas, como por ejemplo de “contacto @ y tu web”, o para atencion al cliente, para consultas y/o pedidos varios según ofrezcas, etc., más que nada para que los usuarios puedan contactar contigo vía tu web, sea cual sea dicha consulta o contacto; por último, pero no menos importante, deberían ofrecerte manejar tu mismo el hosting, para ello, por ejemplo, hay una aplicación que se llama Cpanel, que es el servicio con el que puedes manejar tú mismo tu hosting.